Jessica Perez Garcia

Con profundo amor y gratitud por la vida de Jessica Pérez García, su familia anuncia su partida el miércoles, 29 de octubre de 2025, a las 9:06 de la mañana, en la paz de su hogar y rodeada del amor de su esposo, sus hijos, su madre ,sus hermanas, familia inmediata y buenos amigo.

Jessica nació el 15 de septiembre de 1977, en St. Croix, Islas Vírgenes de los Estados Unidos, hija del fallecido Miguel A. Ventura García y de Evangelina García Ávila, quien aún le sobrevive. Desde muy joven, Jessica mostró un corazón lleno de ternura, una sonrisa que iluminaba cualquier lugar y una fe profunda en Dios. Fue una hija amorosa y ejemplar, atenta y agradecida. Su relación con su madre, Evangelina, fue una de las más dulces expresiones de amor: compartían oraciones, risas y confidencias, unidas por la fe y por un cariño que no conoce límites.

En septiembre de 1998, Jessica contrajo matrimonio con el amor de su vida, Eliezer Pérez, con quien compartió un matrimonio de más de 27 años lleno de amor, respeto y fe. Su unión fue un ejemplo de lo que significa caminar juntos de la mano de Dios, superando pruebas, celebrando alegrías y construyendo un hogar lleno de paz y amor.

Jessica fue una madre dedicada, entregada y amorosa. Sus hijos; Jadiel, Jahziel, Eliah, Karen, Eliezer y Jesiel, fueron su razón de vivir, su orgullo y su mayor bendición. Cada uno de ellos recibió de ella amor incondicional y guía. Celebraba sus alegrías, los apoyaba en sus dificultades y les enseñaba con su ejemplo. Su amor de madre fue constante, profundo y eterno.

Su corazón se llenó aún más con la llegada de su nieto River, su pequeña luz y alegría. Jessica compartía un vínculo muy especial con sus hermanas Maricela Rivera y Veronica Miranda, y con su hermano de corazón David Camacho, a quien amaba como si la sangre los uniera. Con ellos compartió risas, oraciones y memorias que permanecerán vivas por siempre. Entre ellos reinaba un amor fraternal inquebrantable, lleno de respeto, cariño y apoyo mutuo. Jessica también deja un profundo recuerdo entre sus cuñados, José Luis Rivera y Steve Miranda, así como entre sus tíos, tías, sobrinos, sobrinas, primos y primas, quienes siempre la apreciaron por su calidez, su generosidad y su amor incondicional. Cada encuentro con ellos era una muestra de alegría y cercanía, y su vida tocó profundamente a todos los miembros de su familia extendida, dejando una huella imborrable en sus corazones.

Jessica fue una fiel sierva de Dios. Miembro de La Iglesia de Dios Pentecostal M.I. "La Hermosa" en St. Croix, y de La Iglesia de Dios Pentecostal M.I. "Juan 8:32" en Reading PA, Pennsylvania, donde sirvió con pasión y humildad: fue maestra de los niños, presidenta de la Asociación de Damas, cantante, decoradora y organizadora de eventos. También participó activamente en la Asociación de Jóvenes AJEC, donde sirvió como oficial de relaciones públicas, siempre con una sonrisa y un corazón dispuesto a ayudar.

Jessica emigró desde St. Croix, Islas Vírgenes, a los Estados Unidos en 1994, con esperanza y determinación de construir un futuro mejor. Este valiente paso marcó el inicio de una nueva etapa en su vida, llena de sueños, retos y oportunidades. Trabajó para el Distrito Escolar de Reading como asistente de maestra y también como administradora en la clínica dental Gentle Dental. Pero su trabajo más importante y su misión más grande fue su hogar. Jessica vivió para su familia, a quien sirvió con amor, fe y dedicación.

La fuerza y la alegría de Jessica eran contagiosas. Era una mujer radiante: su risa podía llenar cualquier habitación, su sonrisa podía aliviar los corazones más cargados y sus palabras irradiaban calidez y gracia. Daba sin esperar nada a cambio, amaba profundamente y vivía con plenitud. Incluso enfrentando más de doce años de desafíos de salud, lo hizo con valentía, dignidad y una fe inquebrantable en Dios. Durante sus últimas semanas, Jessica estuvo rodeada de su familia, hermanos y hermanas en Cristo, y de muchos amigos queridos. Recibió a todos con los brazos abiertos, compartiendo momentos de oración, música, historias y alegría. Su fe nunca flaqueó, y su espíritu permaneció fuerte hasta su último aliento.

Jessica partió de este mundo tal como lo deseaba: en su hogar, en paz, rodeada de amor, y tomada de la mano de Dios. Su vida fue una bendición, su memoria un tesoro y deja un legado de fe, compasión y fortaleza que permanecerá eternamente en los corazones de quienes la amaron, su amor seguirá brillando a través de su familia, sus hijos y todas las vidas que tocó.

"Luchó la buena batalla, terminó la carrera, mantuvo la fe." - 2 Timoteo 4:7

Los Servicios Fúnebres para Jessica Pérez García están pautados para el sábado, 8 de noviembre de 2025, de 8:00 a.m. a 10:30 a.m., en la Funeraria Edward J. Kuhn Funeral Home, localizada en 739 Penn Avenue, West Reading, PA 19611. Seguido de los servicios, recurriremos en procesión al Cementerio Laureldale, ubicado en 4631 Pottsville Drive, Reading, PA, para acompañar a Jessica a su última morada.